lunes, 27 de abril de 2009

Técnica del Refundido (Jabón de Lavanda y Árbol de Té)

Este jabón es producto de un accidente, tal cual suena. Tengo tantos jabones esparcidos por toda la casa que mi marido, accidentalmente, pisó unos de Árbol de Té que tenía curando en el suelo del baño. El Aceite Esencial de Árbol de Té es uno de los más caros, que unido al resto de ingredientes, era una pena desperdiciar. Así que hice bolitas con los jabones accidentados y las introduje en un refundido de Lavanda.

Y a petición de algunas seguidoras del blog que también hacen jabones, voy a aprovechar para explicar cómo hago yo la Técnica del Refundido. La utilizo para aprovechar todos los jabones que hice al principio, que como no tenía mucha experiencia (mejor dicho, ninguna), algunos no quedaron con una forma muy vistosa como para regalarlos, pero si tenían unos maravillosos ingredientes.

Este es el proceso:

Peso el lote de jabón que quiero refundir (en este caso, de Lavanda), y lo rallo con un rallador lo más fino posible. El jabón utilizado tiene que haber superado ya el proceso de curación (4-6 semanas desde que se hizo, si fue con el Proceso en Frío)

Añado un 10-20 % del peso del jabón en líquido. Generalmente utilizo un ingrediente que potencie las propiedades del jabón base. En este caso como el jabón es de Lavanda, que es principalmente relajante, le he añadido una infusión de Azahar, Hierba Luisa y Melisa. También utilizo mucho la leche de cabra, soja o almendras; en otras ocasiones, Hidrotalos de flores o plantas como el de Rosas, Hamammelis, Azahar. O incluso se pueden utilizar varios.

Una vez impregnado con los líquidos elegidos, lo dejo reposar unas horas, incluso toda la noche, para que el jabón se humedezca, ablande y se funda mejor.

Pongo el jabón al Baño María, a fuego lento y lo tapo. De vez en cuando voy removiendo, hasta que la mezcla sea lo más homogénea posible, con todos los trocitos de jabón bien fundidos. Para llegar a este punto suele tadar unas 2 horas.

NOTA: Un punto importante a tener en cuenta en este paso es que el color del jabón inicial puede cambiar dependiendo del líquido añadido y por el calentamiento. Por ejemplo, la leche, al calentarse junto con el jabón, se tuesta y el jabón puede adoptar un color marronaceo; si ese es nuestro color buscado, perfecto, pero si ese no es nuestro objetivo, es mejor ablandar el jabón primeramente con mitad de agua y una vez fundido añadimos la otra mitad de los líquidos de leche, para que no permanezca tanto tiempo en el proceso de cocción.

Una vez que el jabón esté totalmente fundido, si no vemos la mezcla muy homogénea, podemos pasarle un poco la batidora a la mínima velocidad para que no haga espuma. Hay veces que el líquido inicial no es suficiente, el jabón está muy espeso y precisa algo más de líquido.

Es momento de retirarlo del fuego y añadirle otros ingredientes con los que queramos enriquecer el jabón (Aloe Vera, Cacao, Miel, Avena, Arcilla…).

Podemos aprovechar para añadir un sobreengrasado, si el jabón base no lo tenía, o si queremos aumentarlo. Generalmente, para sobreengrasar utilizo el aceite más caro o el que aporta más propiedades, para asegurarme que no se saponifica con la sosa y no se calienta, por lo que no pierde ninguna de sus propiedades. Lo suelo hacer en un porcentaje del 5-8 % del peso del jabón base. Son ideales en este momento, el de Germen de Trigo, Zanahoria, Caléndula, Neem, Aguacate, Árnica, Borago, Jojoba, Rosa Mosqueta, Cade... En este caso, añadí Aceite de Agán, aceite tremendamente rico, por eso se le denomina el Oro líquido de Marruecos; es principalmente beneficioso en casos de acné (potenciando la acción del Árbol de Té que lleva las bolitas), es antiarrugas, cicatrizante, antiséptico

Ahora toca enmoldar, el momento más engorroso de esta técnica. La mezcla suele estar bastante espesa, por lo que hay que hacerlo muy rápidamente para que permanezca caliente y no espese más al irse enfriando. Por lo tanto, hay que ir ajustando bien el vertido al molde, aplastando con una cuchara, golpeando el molde para que baje la mezcla y queden los menos rincones posibles sin jabón. También aprovechamos para decorar. En este caso, introduje las bolitas previamente hechas con el Jabón “accidentado" de Árbol de Té. También se puede dividir la mezcla en varias porciones, teñirlas de colores diferentes y hacerlo a rayas. O colocar por encima hierbas decorativas. Todo dependerá de la imaginación.

Dejamos enfriar. Se puede acelerar este momento introduciéndolo en la nevera. Cuidado no lo confunda la familia con un bizcocho.

10º Cuando esté durito, lo desmoldamos, lo cortamos de la forma habitual y lo ponemos a secar. La ventaja de esta técnica sobre el jabón recién hecho con el Proceso en Frío, es que se puede utilizar a los pocos días, en cuanto esté duro y seco.

El resultado es estupendo, aunque es verdad que el corte no queda tan suave al tacto como el recién hecho, e igual no es tan uniforme. Pero las propiedades son igualmente excelentes y así no tenemos que tirar nada de jabón, por lo que no despilfarramos material. Hay compañeros que en esta técnica utilizan el microondas con pequeños tiempos de calentamiento y removiendo entre ellos, o el horno a temperatura baja, removiendo igualmente de vez en cuando. El microondas sólo lo he utilizado cuando la cantidad de jabón a refundir era muy pequeña; con el horno no he probado aún. Es que el resultado que obtengo con el Baño María es tan bueno, que no me quiero arriesgar a cambiar, pero tendré que probarlo, no me quedaré con las ganas.

Espero, con esta explicación, haber ayudado a las personas que me han pedido que explique este proceso. En cuanto pueda, explicaré también paso a paso el Proceso en Frío, para aquellas personas que no han hecho nunca jabón pero que les gustaría iniciarse… pero lo dicho, en cuanto pueda.

jueves, 23 de abril de 2009

Jabón de Árbol de Té

Os presento el jabón que utilizo para mi higiene facial. Estoy encantada. Lleva Aceite Esencial de Árbol de Té Australiano, excelente producto para la piel. Es excelente para el cutis porque produce un control sobre las glándulas seborreicas, lo que hace controlas la producción de grasa. Por eso está indicado principalmente para pieles mixtas, grasas y acnéicas. Además es antiséptico, antiinflamatorio y cicatrizante, por lo que favorece la disminución casi inmediata de esos odiosos granitos.

Por su efecto regulador de la grasa, resulta excelente también como champú, para el cuidado del cabello graso.

Posee potentes propiedades antisépticas de triple acción, bacterias, hongos y virus. Por lo tanto, es un jabón muy útil para la higiene corporal de personas propensas a las infecciones leves, como hongos en los pies, papilomas, uñeros, pie de atleta, infecciones vaginales leves…Este aceite tiene una importante capacidad de penetración en la piel; aún así va acompañado de Aceite de Germen de Trigo, vehículo excelente para trasportar todos los principios activos al interior de la piel.

Para colmo lleva una rica infusión de Té Blanco de la provincia de Tujian, de cosecha limitada, un té todavía algo desconocido, que se cultiva en las zonas de alta montaña de China. Allí es conocido también con el nombre de Yinzhen (agujas de plata), por la forma de sus brotes.

Es la sustancia que ofrece la naturaleza por mayor poder antioxidante, aumenta las defensas del organismo y neutraliza la acción de los radicales libres. Por algo se le llama el Té de la Juventud.

lunes, 20 de abril de 2009

Jabón de Lodos de Azufre y Salvia

Este sábado 18 de abril tuve un encuentro muy especial con personas con la misma afición que yo. La cita tuvo lugar en Villalba, en el Taller de Susana e Isabel, donde también conocí a Clara, Tania y Lourdes. Pasamos una tarde muy agradable haciendo lo que más nos gusta, jabón. Muchas gracias, aprendí un montón y lo pasé muy bien.

Me dieron esta receta tan estupenda para pieles mixtas y grasas, gracias al efecto antiinflamatorio, desinfectante, cicatrizante y regulador de grasa de los Lodos de Azufre y del Extracto de Salvia.

Una antigua leyenda dice que la Salvia, gracias a su alto contenido en Fitoesteroles, favorece la fertilidad femenina y además disminuye los efectos adversos de la menopausia. Por otra parte, reduce el flujo de leche materna por lo que no debe ser utilizada por mujeres que se encuentren en el periodo de lactancia.

Este jabón está enriquecido con Hidrolato de Azahar, Aceite Esencial de Azahar y Melisa, que dejan un aroma fuerte en el jabón pero tremendamente agradable; ambos poseen un potente efecto relajante.

Jabón de Café

Estaba deseando hacer este jabón porque resulta un producto multiusos. Es muy versátil.

En primer lugar, es ideal en la ducha de la mujer, de todo el mundo es conocido el gran poder anticelulítico que posee el café (aplicado en la piel, claro). Para colmo, va enriquecido con Leche de Cabra y Aceite de Avellanas, manjares ideales para la piel.

En segundo lugar, también es muy apreciado en la ducha del hombre, ya que va aromatizado con vainilla, fragancia que mezclada con la del café, resulta muy agradable para el sexo masculino; además es excelente para eliminar los malos olores, por lo que resulta ideal para el hombre cuya profesión le hace captar olores difíciles de eliminar (pescaderos, mecánicos), o que simplemente sudan en exceso.

Y en tercer y último lugar, pero no por ello menos importante, es imprescindible tener un jabón de este tipo en la cocina, cerca del fregadero, porque al ser muy eficaz en la eliminación de olores, es conveniente lavarse las manos con este jabón después de pelar ajos o cebollas, limpiar marisco o pescado… No quedará rastro de estos desagradable olores, tan difíciles de eliminar.

Ingredientes: Aceite de Oliva, Coco, Palma, Aceite de Avellana, Manteca de Cacao, Vitamina E, Hidróxido de Sodio, Leche de Cabra, Café molido y en infusión, Esencia de Vainilla.

Propiedades: Estimulante, anticelulítico, desintoxicante, mejora la circulación, antioxidante, elimina olores.

domingo, 19 de abril de 2009

Jabón de Coco y Chocolate

Como vereis, tengo muchos jabones de chocolate, es mi dulce favorito, y si puedo comérmelo, por qué no voy a ducharme con él.

Este en concreto está realizado con el Método del Refundido. Utilicé un Jabón de Coco, al que añadí virutas de Jabón de Chocolate como decoración. Me encantó el resultado, tanto estético como en la ducha.

Ingredientes: Aceite de Oliva, Aceite de Coco, Aceite de Girasol, Manteca de Cacao, Vitamina E, Hidróxido de Sodio, Agua destilada, Leche de Coco, Cacao en polvo, Coco rallado, Esencia de Chocolate y Canela.


Propiedades: Energizante, estimulante, antidepresivo. Hidratante, nutritivo, reestructurante, antiséptico, suavizante, anticelulítico, antiestrías.

Jabón "After Eight"

Mi querida Silvi, como ves, todo llega, y el tuyo ha tardado en llegar porque quería que el jabón se pareciera lo máximo posible al Alter Eigth que se come. Esto me ha llevado un poquito más de tiempo. Pero todo lo bueno se hace esperar, así que, aquí tienes tu jabón, ahora no sólo no faltará este dulce en tu frigorífico, sino que además lo tendrás también en tu bañera, golosona.

Ingredientes: Aceite de Oliva, Aceite de Coco, Aceite de Palma, Manteca de Cacao, Manteca de Cerdo, Aceite de Avellana, Vitamina E, Hidróxido de Sodio, Leche de Almendras, Cacao en polvo, Aceite Esencial de Menta, Esencia de Chocolate.

Propiedades: Energizante, estimulante, antidepresivo, hidratante, nutritivo, anticelulítico, antiestrías, antiséptica.

Jabón de Caléndula

El Aceite de Caléndula es maravilloso. Tiene multitud de propiedades para la piel, principalmente para las sensibles, incluso la de bebés y ancianos. Posee multitud de propiedades terapéuticas, por lo que está indicado para problemas dermatológicos, favorece la cicatrización, y regeneración epitelial.

Está vehiculizado por el Aceite de Aguacate, altamente terapéutico, riquísimo en proteínas y vitaminas.

Estos dos aceites hacen que este jabón sea perfecto para pieles extremadamente delicadas.

Ingredientes: Aceite de Oliva, Aceite de Coco, Aceite de Palma, Manteca de Karité, Aceite de Caléndula, Aceite de Aguacate, Vitamina E, Hidróxido de Sodio, Leche de Soja, Infusión de Caléndula, Aceite Esencial de Lavandín.

Propiedades: Descongestivo, antiinflamatorio, antiséptico, cicatrizante, tonificante. Ideal piel seca, dermatitis, heridas y quemaduras.

Champú de Huevo

Últimamente estoy experimentando con el champú sólido. Ese fue siempre mi punto débil, nunca encontraba el que le iba bien a mi pelo. Por supuesto, ese problema se solucionó elaborando mi propio champú. He realizado varios con diferentes propiedades que iré poniendo poco a poco.

El de hoy es un champú muy nutritivo e hidratante, no aporta nada de grasa, al mismo tiempo que respeta el color del tinte y las mechas.

Ingredientes: Aceite de Oliva, Aceite de Coco, Aceite de Girasol, Aceite de Ricino, Vitamina E, Hidróxido de Sodio, Leche de cabra, Yema de Huevo, Esencia de Canela.

Propiedades: Nutritivo, hidratante. Ideal para el cabello seco o dañado, le nutre, le da brillo y volumen.

Jabón de Pepino y Menta

De todos los jabones que he realizado hasta ahora, este es el me hace olerle una y otra vez. Se podría llamar “Jabón Buenos Días”. Ese aroma que deja el Aceite Esencial de Menta es espectacular. Despeja la piel y las fosas nasales, al igual que la mente, por lo que lo veo ideal para la ducha de primera hora de la mañana, cuando no quieres abandonar las sábanas y el edredón por nada. Es ideal no sólo para el cuerpo sino también para la cara, por los efectos tan beneficiosos que tiene el pepino para el cutis. Además lleva semillas de amapola, que le confiere al jabón propiedades exfoliantes. Me encanta.

Ingredientes: Aceite de Oliva, Aceite de Coco, Aceite de Palma, Aceite de Jojoba, Vitamina E, Hidróxido de Sodio, Agua destilada, Pepino triturado, Aceite Esencial de Menta, Semillas de Amapola, Tintura de Benjuí.
Propiedades: Exfoliante, refrescante, astringente, antiséptico, dolores musculares. Limpiador suave ideal para el rostro.

martes, 14 de abril de 2009

Jabones de Frutas

Esta es mi segunda experiencia con la Glicerina. De momento he probado con rodajas de Limón, Naranja y Kiwi. Pero mi intención es probar muchas más. Estéticamente son estupendos, aunque he de reconocer que en el baño no se cómo se comportan, no los he probado, me da pena que se les quite la forma.

Jabón de Yogur Griego y Rooibos (refundido)

Últimamente me he aficionado a trabajar con el método del refundido. Comencé a realizarlo porque tenía muchas partidas de jabón que realicé en mis comienzos y que, a pesar de sus excelentes propiedades, no quedaron muy estéticos. No podía tirarlos, tenían ingredientes excelentes, pero tampoco podía regalarlos en mi boda.

Ya sé que hay muchos detractores de este método, alegando resultar muy pesada su elaboración. Mi experiencia hasta ahora es que me divierte igualmente realizarlos y además todos me están quedando estupendos. Además tienen la ventaja de que endurecen enseguida y los puedes utilizar a los pocos días. Este método es estupendo para las personas impacientes como yo, ya que a veces me desespera un poco tener que esperar entre 4 y 6 semanas para respetar el periodo de curación antes de utilizar el jabón realizado por el proceso de saponificación en frío. Además, le puedes añadir más ingredientes enriquecedores que no se deterioran con la Saponificación.

Del grupo de jabones refundidos que tengo hechos hasta ahora, este es mi favorito. Mi intención no era ni obtener este color ni esta forma decorativa, pero me ha encantado el resultado a pesar de no ser mi objetivo inicial.

Ingredientes: Aceite de Oliva, Coco y Almendras Dulces, Manteca de Karité, Vitamina E, Hidróxido de Sodio, Yogur Griego, Infusión de Rooibos e Hibisco, Benjuí, Esencia de Rosa, Lavanda y Espliego.

Propiedades: Desinfectante, antiséptico, refrescante, nutritivo, hidratante, antioxidante. Ideal dermatitis, eczemas. Ideal partes íntimas.

sábado, 11 de abril de 2009

Jabón de Nocilla

En esta ocasión, he tenido que explotar al máximo mi imaginación porque quería hacer un jabón muy especial, inspirado en ti, Ana.

Ana está pasando malos momentos por culpa de una “difícil” enfermedad que le diagnosticaron hace unos meses. Pero ella está siendo para todos todo un ejemplo de coraje, valentía y lucha. Está afrontando la enfermedad de una forma admirable. Es una campeona y está superando cada bache que se encuentra en este duro camino que le ha tocado vivir. Mucho ánimo, Ana.

Lo he hecho de Nocilla porque es una adicta a este dulce, cosa que a mi me viene genial porque en su casa nunca falta y cuando voy a verla me aprovecho, ya que en la mía nunca hay, no lo compro porque me comería el bote de una tacada, y las caderas no me lo perdonan luego.
Ingredientes: Aceite de Oliva, Aceite de Coco y Palma, Aceite de Almendras dulces, Aceite de Avellanas, Manteca de Cacao, Vitamina E, Hidróxido de Sodio, Leche de almendras, Avellanas molidas, Cacao en polvo, Azúcar, Aroma de chocolate.

Propiedades: Energizante, estimulante, antidepresivo, hidratante, nutritivo, anticelulítico, antiestrías.

Jabón de Lufa y Ylang-Ylang

Esta fui la primera vez que utilicé la glicerina para hacer jabón (y de momento, la única). La experiencia fue bastante satisfactoria: primero, porque la elaboración es mucho más sencilla que los jabones de aceites saponificados por el proceso en frío; y segundo, porque a las pocas horas está listo para utilizar, que eso, para personas impacientes como yo, es importante.

El resultado es interesante, pero sigo prefiriendo los de aceites saponificados, estoy más enganchada a ellos. Los de glicerina los puede hacer cualquiera, pero los de aceite... bueno, también, pero con mas dificultad. Y lo digo por experiencia propia, que tardé meses en conseguir que todos me salieran perfectos... o casi perfectos.

Para mí, hacer jabones supone un reto de superación diaria. Pero lo mejor de esta afición es que únicamente compites contigo misma, el único objetivo es, con el jabón que estás realizando en ese momento, querer superar a los anteriormente realizados.

Ingredientes: Glicerina, Lufa, Aceite Esencial de Ylang-Ylang. Ylang-Ylang significa "flor de flores". Posee una fragancia sensual, embriagadora, dulzona.

Propiedades: El A.E. de Ylang-Ylang es principalmente una sustancia estimulante. Estimula todos los planos: físico, mental, sexual, psicológico. Posee propiedades afrodisíacas probadas, es antidepresivo, relajante, previene el insomnio, aumenta la energía. Además refuerza la piel y el cabello debilitados. La lufa es exfoliante y favorece la circulación.

jueves, 9 de abril de 2009

Jabones Terapéuticos

Cada uno de los jabones que realizo está hecho con mucho mimo y siempre pensando en el beneficio específico que puede aportar a la piel. De esta manera, no sólo serán para la higiene, sino también serán jabones de tratamiento.

Antes de la confección de cada uno, decido el objetivo que quiero conseguir con ese jabón en concreto, e incluso para quién va destinado. En base a esto, comienzo a estudiar la combinación más adecuada de ingredientes para conseguir tal fin. Y si de paso puedo hacerlo más atractivo tanto para la vista como para el olfato, mejor que mejor.

Todos los jabones están elaborados de forma totalmente artesanal, con materias primas cien por cien naturales. La base está realizada con aceites vegetales, principalmente aceite de oliva virgen extra, y otros aceites y mantecas que confiere a mis jabones gran poder hidratante y nutritivo. A esto le añadimos una mezcla perfecta de aceites esenciales y otros ingredientes naturales (arcilla, avena, algas, leche, miel…), que confieren a los jabones propiedades específicas para cada necesidad. Además, todos ellos van enriquecidos con vitamina E (potente antioxidante, para las/los que nos preocupa el envejecimiento de la piel). Por lo tanto, mis jabones no son únicamente para la higiene de la piel, además poseen propiedades terapéuticas.

Jabón de Chocolate y Naranja


Este jabón se lo quiero dedicar a l@s admirador@s incondicionales de mis creaciones, a aquellos que, aunque me salieran feísimos, les parecerían una maravilla sólo por estar hechos por mí. Principalmente a mis primeras devotas Mónica, Eva, Yoli, Sonia… Ellas fueron las primeras en conocer mi blog, y se han enganchado de tal manera que ha sido el impulso definitivo que necesitaba para continuar con esta “locura”.

Ingredientes: Aceite de Oliva, Coco y Girasol, Vitamina E, Manteca de Cacao, Hidróxido de Sodio, Cacao en polvo, Aceite Esencial de Naranja, Esencia de Chocolate, Pulpa de Naranja.

Propiedades: Energizante, estimulante, equilibrante, antidepresivo, hidratante, nutritivo, anticelulítico, antiestrías.

lunes, 6 de abril de 2009

Jabón de Limón

Al limón se le considera una sustancia curativa. Es capaz de combatir eficazmente muchísimas enfermedades de modo natural, gracias a su alto contenido en Vitamina C.

El aceite esencial de limón es muy eficaz para eliminar las impurezas de la piel, es un excelente astringente y antiséptico, por lo que es muy recomendado para las pieles grasas. Además elimina las manchas de la piel, favorece la cicatrización y es antiarrugas, gracias a su alto contenido en Vitamina E. El limón neutraliza el mal olor, por lo que resulta útil para la higiene de personas con tendencia a la sudoración.

Ingredientes: Aceite de Oliva, Coco y Girasol, Vitamina E, Hidróxido de Sodio, Agua destilada, Aceite Esencial de Limón, Jugo de limón.

Propiedades: Antiséptico, antibacteriano, astringente, calmante, depurativo, tonificante. Estimulante del sistema nervioso y circulatorio.

Jabón de Avena y Miel

Dentro de los recursos naturales que nos ofrece la naturaleza para el cuidado de la piel, uno de mis favoritos es la avena.

Este jabón es apropiado tanto para las pieles secas como para las grasas. Ejerce un excelente efecto limpiador, junto con un suave efecto exfoliante, pero respetando el efecto barrera de la piel, evitando la deshidratación de la misma. Está enriquecido (en el sobreengrasado) por Aceite de Germen de Trigo, que por su alto contenido en Vitamina E, resulta un excelente antioxidante, antiarrugas y antienvejecimiento. Es un aceite muy hidratante y regenerador, dándole mayor elasticidad a la piel, con lo cual también previene la formación de estrías. A todas estas propiedades se añaden las de la miel, sustancia muy nutritiva y antibacteriana, ideal para pieles con puntos negros y acné.


Ingredientes: Aceite de Oliva y Girasol, Vitamina E, Aceite de Germen de Trigo, Hidróxido de Sodio, Agua destilada, Avena molida, Miel.

Propiedades: Suave exfoliante, suavizante, calmante, antioxidante, depurativo, cicatrizante, regenerador, nutritivo, emoliente, antibacteriano, antiestrías.