Soy muy perezosa para echarme crema después de la ducha, así que pensé que si la elaboraba yo misma, igual me hacía más ilusión ponérmela. Así que… dicho y hecho… superado el reto de los jabones (que por su puesto seguiré elaborando y mejorándolos cada día) decidí probar con las cremas. De momento sólo he hecho corporales, pero en cuanto me forme un poquito más, pasaré a las faciales.
Esta de Rosa Mosqueta fue la primera. Me inspiré en una receta del blog de otra jabonera, pero no recuerdo de quién, así que por favor, que me perdone por no nombrarla.
Deja la piel tremendamente suave, no la he tenido así en mi vida. Pero siendo sincera, tiene un fallo, no se absorbe muy rápidamente por lo que hay que esperar un rato para poderse vestir. La primera no me podía salir perfecta.
Ingredientes: Agua de Rosas, Cera de Abejas, Vitamina E, Manteca de Karité, Aceite de Jojoba, Aceite de Germen de Trigo, Aceite de Avellanas, Aceite de Rosa Mosqueta, Aceite Esencial de Rosa Geranium y Aceite Esencial de Lavanda.
El Aceite de Rosa Mosqueta es un aceite muy preciado. Yo la hice principalmente pensando en la prevención y atenuación de las estrías (debidas a los cambios continuos de peso), pero son múltiples las propiedades que aporta. Es el regenerante de la piel más potente que existe, por lo que es ideal para la post-depilación, la cicatrización de las heridas (una vez cerradas), dejando la cicatriz muy tenue al evitar su hiperpigmentación y la formación de queloide. También es un potente antiarrugas, al mejorar la firmeza y elasticidad de la piel (así que también me lo pongo como contorno de ojos, por la noche, porque como ya he comentado, queda una sensación un poco grasa).
Por no hablar de las propiedades del resto de ingredientes. En definitiva… magnífica crema, aunque se puede mejorar.
HOLA, MÓNICA.
ResponderEliminarINSISTO QUIERO SER TU CONEJILLOS DE INDIAS, A VER SI ME PREPARAS EL LOTE QUE TANTAS VECES TE HE PEDIDO.
QUE TE LO PAGO, JE, JE.
Hola Mónica. Ante todo felicidades por tu blog y por tus trabajos que están genial.
ResponderEliminarLa pinta de la crema es estupenda. Me gustaría saber la cantidad de cera que le has puesto en relación con los aceites y el agua. Lo pregunto porque he hecho alguna crema emulsionándola con cera de abeja y al cabo de unos días se me acaba separando el agua del aceite, igual es porque he puesto demasiada cera o algo así. Un abrazo y gracias
Hola Misae:
ResponderEliminarEncantada de conocerte, me alegra que te gusten mis trabajos, muchas gracias.
En cuanto a la pregunta sobre cremas, primero he de decirte que yo también estoy aprendiendo, no estoy tan puesta como en los jabones, por lo que las respuestas que te puedo dar son en base a mi experiencia, que en el caso de las cremas es escasa. Yo las estoy haciendo con un porcentaje de cera de entre 8-10% y de agua, aproximadamente 50-60%. Pero en realidad no sé si las proporciones son correctas, eso sí, nunca se me han separado. El único defecto que las encuentro es que se tardan un poco en absorber, por lo que no me puedo vestir inmediatamente. Espero haberte ayudado, pero me reitero, no soy nada experta en cremas. Un saludo.
Muchas gracias por las explicaciones. Yo no tengo ni idea de cremas, las únicas que me salen con buenos resultados son las batidas con karité. Con las otras llevo un montón de intentos y no acaban de salir. La que hice emulsionada con cera además de separarse el agua del aceite, quedó tan densa que resulta desagradable(en la cara).....la acabé usando de crema de manos y así iba mejor. Últimamente estoy probando a emulsionarlas con lecitina de soja, pero no acabo de encontrarles el punto. Será cuestión de ir probando y poco a poco ir viendo como resultan.
ResponderEliminarUn beso